Red Bull nunca ha ganado el GP de Canadá. Ni siquiera en las dos últimas temporadas cuando sus monoplazas eran casi un segundo más rápidos que el resto (o dos segundos en algunos momentos de 2011). Pero la escudería energética está dispuesta a borrar esa mancha de su expediente este fin de semana en Montreal.
La victoria de Mark Webber en Mónaco y el liderato en el campeonato de constructores hacen que el equipo Red Bull aterrice en Canadá con la moral por las nubes. Ni siquiera la prohibición de su falso fondo plano puede estropear su optimismo. Christian Horner, director de la escudería, avisa:
“Esta es una de las pocas carreras que Red Bull nunca ha ganado, a pesar de que estuvimos muy cerca la temporada pasada. Todos queremos rectificar esa situación y sería maravilloso conseguirlo este fin de semana. Montreal es todo lo contrario a Mónaco porque la potencia es crucial. Es difícil predecir si vamos a ser competitivos, pero es seguro que vamos a pasar al modo ataque”
Horner insiste en que el veto de la FIA a su fondo plano agujereado no afectará a Red Bull, aunque aprovecha la ocasión para hacerse un poco la víctima:
“No ha sido sencillo convertirnos en un equipo grande, pero ahora que lo somos, cualquier cosa que hacemos, es examinada con lupa de una forma mucho más exhaustiva que cuando éramos un equipo del montón. A pesar de eso seguimos siendo un equipo joven con hambre de títulos”
PD. ¿Me lo parece solo a mí, o Christian Horner está reconociendo que hasta ahora la FIA les había dado una especie de cheque en blanco para interpretar el reglamento a su antojo?